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Un almuerzo de la élite social y política presidido por Luis Tejada Sorzano. Están presentes, entre otros, Ismael Montes, Juan Muñoz Reyes y Carlos Victor Aramayo.

La iniciación de las transformaciones económicas, en los gobiernos de Toro y Busch, tuvo continuidad en la década de los 40', a partir del gobierno del General Enrique Peñaranda (1940-1943) quien obtuvo del gobierno de Estado Unidos la asesoría de una misión Técnica presidida por Merwin Bohan para realizar un diagnóstico y elaborar una propuesta de desarrollo económico que se conoce con el nombre de Plan Bohan.

El Plan Bohan propuso un plan de diversificación económica para la producción de artículos de consumo basico; identificándose el área de Santa Cruz, como la región de potencial requerido para iniciar el proceso. El Plan, igualmente, establecfió como prioridad la construcción de infraestructura caminera para unir el altiplano y los valles con el oriente, principalmente la carretera Cochabamba-Santa Cruz; iniciandose su construcción en 1943.

En 1942 se creó la Corporación Boliviana de Fomento (CBF), como entidad encargada de impulsar el desarrollo agroindustrial. Posteriormente, se logró un crédito significativo del Banco de Exportaciones e Importaciones, para que la CBF inicie sus actividades. A partir de 1943, la CBF inició estudios para instalar el ingenio azucarero de Guabirá (Santa Cruz), que recién en 1957 comenzó su producción al mismo tiempo otorgó créditos al ingenio privado de la Esperanza.

También a comienzos de 1942 se logró otro crédito del Banco de Importaciones Y exportaciones para YPFB, destinado a realizar nuevas prospecciones y la construcción de oleoductos y refinerías en Cochabamba y Sucre. Entre 1945 y 1949 se construyeron los oleoductos Camiri-Cochabamba y Camiri-Sucre impulsandose la producción de petróleo crudo y derivados.

A través de estas acciones, se comenzó el proceso de integración del oriente que hasta los años 30' estuvo marginado del movimiento económico nacional.

La población cruceña a través de sus organizaciones cívicas, planteaba ya en 1905, la necesidad de intergrarse con el occidente y también con los países limítrofes de Argentina y Brasil. Cuarenta años mas tarde, a partir de un cambio de la política y la economía comenzaba este proceso que tuvo un impulso definitivo a partir de 1952.

Observaciones Finales

La gran Depresión deprimió la demanda y recesión económica sin precedentes y que generó elevados niveles de desempleo y malestar social, que no pudo controlarse con la represión. Al mismo tiempo, la política económica al sujetarse a las reglas del patrón-oro, profundizoó la crisis, la misma que obligó a cambiar de rumbo a las políticas estatales. Una vez que se declaró la moratoria de la deuda externa, el Estado comenzó a controlar los flujos de divisas y a determinar los tipos de cambio. Asimismo, tomando en cuenta las regulaciones del CIE y la guerra del Chaco, el Estado asume un nuevo rol: interventor y mediado.

A partir de este cambio arranca un proceso, sobre la base de una nueva concepción acerca del papel del Estado, de transformaciones económicas e institucionales que avanzaron gradualmente y que tuvieron impulso definitivo a partir de 1952. La mayor expresión de este proceso fue que Bolivia finalizó los 40' con una presencia estatal en los ámbitos financiero y productivo.

El aspecto negativo se encuentra en el costo económico y social de la crisis y en el deterioro del secor minero, profundizado por el carácter de la intervención estatal en medio de la inestabilidad política. La mineria continuó generando divisas; empero, su dinámica estuvo determinada por el rol subordinado que el Estado le asignó.